Las viviendas se encuentran a solo diez minutos a pie de la emblemática playa de Las Canteras. La llamada  ‘La Fábrica de Hielo Residencial’ está entre el puerto y la playa, en  una zona que actualmente pasa por una remodelación urbanística y que parece que será uno de los enclaves con mayor proyección de futuro de la capital grancanaria.  

El modelo cooperativo 

Detrás de La Fábrica de Hielo  hay una cooperativa de viviendas. Las futuras personas residentes se han organizado para ser quienes promueven el proyecto. “Aquí los socios no son simples compradores. Son parte activa del proceso de levantar sus casas ”, explica José Miguel Martín Sutil, gestor de la cooperativa.  

Bajo este modelo de transparencia y colaboración consiguen eliminar el coste añadido de una promotora comercial para construir a precio de coste, lo que se traduce en ahorros del 20 % al 40 % en el precio final de cada vivienda. “Gracias a la cooperativa un piso que en el mercado libre sería inaccesible, puede salir hasta casi a la mitad de precio, con la misma calidad”, detalla Martín Sutil.  

La Fábrica de Hielo se suma a la tendencia de viviendas colaborativas y sostenibles. Años atrás, , Triodos Bank apoyó la cooperativa Arroyo Bodonal en Tres Cantos (Madrid). Se levantaron 80 viviendas con criterios de sostenibilidad, que incorporaban energía geotérmica para climatización, sistemas de iluminación eficiente y un aislamiento avanzado, unas medidas que lograron reducir el consumo energético en un 65 % respecto al de un edificio convencional. Hoy, la iniciativa en Gran Canaria toma el relevo en las islas. Según Antonio Benjumea, responsable del banco en las islas,  “es el proyecto de construcción sostenible más importante financiado por Triodos Bank en Canarias”. La Fábrica de Hielo es, además, uno de los pocos edificios residenciales del archipiélago que alcanzan la máxima calificación energética A . 

Todas las decisiones pasan por la asamblea de cooperativistas, donde cada integrante tiene voz y voto. En palabras de José Miguel Martín Sutil,  “en las cooperativas cada familia participa en la creación de su hogar y esa  implicación colectiva aporta transparencia y compromiso, algo que el modelo tradicional no ofrece”. En Canarias este enfoque cobra cada vez más  fuerza como alternativa real a la crisis de la vivienda.  

Construcción y sostenibilidad 

La Fábrica de Hielo Residencial se distingue por su modelo de gestión, sí, pero también por su conciencia por la sostenibilidad en la construcción, que  forma parte esencial del planteamiento. El proyecto incorpora tecnologías y soluciones de vanguardia. De entrada, es el primer edificio de Canarias con una fachada modular prefabricada a gran escala. Esto significa que los muros exteriores no se levantaron ladrillo a ladrillo de forma artesanal, sino que se ensamblaron paneles completos fabricados previamente. Se han instalado unos 14.000 metros cuadrados de paneles de fachada del tipo Ecovent, con capas aislantes de última generación . “Gracias a la fachada industrializada logramos un aislamiento térmico y acústico excelente en todo el edificio, a la vez que acortamos los plazos de obra y reducimos al mínimo los residuos de construcción”, explica José Miguel Martín Sutil.  

Así lucirá el edificio La Fábrica de Hielo Residencial, un diseño moderno que redefine el paisaje urbano.
Así lucirá el edificio La Fábrica de Hielo Residencial, un diseño moderno que redefine el paisaje urbano.

El sector de la construcción es uno de los principales generadores de emisiones de CO₂ y consumidores de energía. La Fábrica de Hielo incorpora varias soluciones sostenibles que reducen su impacto ambiental y mejoran la eficiencia del edificio. Se ha instalado un sistema de aerotermia para climatización en todas las plantas y una solución específica en las ventanas que evita el sobrecalentamiento interior sin bloquear la luz natural. “Lleva muchísimo cristal, con una solución que no impide ver hacia afuera, pero sí que el sol recaliente  el interior”, apunta  Martin Sutil.  La estructura ha sido diseñada para utilizar hasta un 20 % menos de hormigón y acero que un edificio tradicional. “Toda la estructura es más flexible y ligera, el edificio se va a mover, porque un rascacielos rígido cedería. Con materiales más elásticos hemos podido usar entre un 15 y un 20 % menos de hormigón y acero que en un edificio tradicional”, explica el responsable de la cooperativa, que añade que “lo que entra en la obra se queda en la obra” en referencia al uso de Pladur en el interior , un material que reduce significativamente el consumo energético y que genera muy poco desperdicio. La ingeniería del proyecto ha minimizado las instalaciones de agua, energía y cableado, con la correspondiente reducción del uso de materiales. Además, la iluminación de las zonas comunes funciona de forma autónoma mediante placas solares, los ascensores son de última generación y se han incorporado sistemas avanzados de protección contra incendios. También hay soluciones sostenibles en los sistemas de calefacción y refrigeración, que se basa íntegramente en aerotermia.  

El resultado es un hogar que va a permitir a quienes lo habiten  ganar en calidad de vida al tiempo que disminuyen su huella ecológica. 

Apoyo de las finanzas éticas 

“Es la tercera promoción que financiamos en Canarias con calificación energética A. Cada vez hay un perfil comprador más interesado en la vivienda sostenible”, asegura Antonio Benjumea, director de Triodos Bank en las islas. Materializar un proyecto así de ambicioso requiere, además del empuje de las personas cooperativistas, un apoyo financiero sólido y alineado con sus valores. Triodos Bank ha respaldado económicamente la iniciativa desde sus inicios. “Esta experiencia de construcción innovadora y sostenible fue posible gracias al trabajo y la imaginación de los cooperativistas y también al apoyo de un banco como Triodos”, concluye Martín Sutil.