Isabel de Andrés convirtió el pajar de su abuelo en un laboratorio de cosmética sostenible. Así empezaron casi 2 décadas de cuidado de la piel y del entorno.

Tradición e innovación

“Siempre me gustaron las cosas hechas a mano, el valor añadido de lo que somos capaces de hacer. Ya de pequeña se me ocurrían cosas imposibles y mareaba a mi madre para que me ayudara a llevarlas a cabo, siempre lo menos convencional, lo que todavía nadie había hecho”. Y lo hizo. Son palabras de Ana Isabel de Andrés, promotora y directora técnica, de Amapola Biocosmetics, una iniciativa que lleva casi dos décadas en el mercado especializada en la elaboración natural de cosméticos 100% sostenibles para todo tipo de cuidados para la piel. Son ya toda una referencia en el sector logrando que la cosmética ecológica llegue cada vez más a nuestros hogares.

Una forma de vida

Ana tiene una particular forma de ver la vida, y está convencida de que el trabajo y la vida personal pueden estar en armonía y conexión. Eligió el entorno natural de sus antepasados, San Cristóbal de Segovia, donde poder vivir y criar a sus hijos, y a su vez ser capaz de desarrollar su propio negocio sin necesidad de alterar el entorno.

Para esta mujer emprendedora, “las empresas pueden ser sostenibles y humanizadas, cuyo objetivo no sea solo enriquecerse, y así poder contribuir de alguna manera al desarrollo de la sociedad”.

Al igual que para ella Amapola Biocosmetics es un sueño cumplido y una forma de vida, da prioridad a desarrollar el potencial y las capacidades de las personas que forman su equipo, para conseguir que crezcan y sientan que tienen algo que aportar.

Cosmética 100% sostenible

En Amapola completan el ciclo productivo con un consumo energético casi nulo y sin generar residuos contaminantes. ¿Cómo lo logran Cuidando cada paso del proceso de fabricación, desde la recolección de las materias primas hasta la innovación en la formulación, envasando y etiquetando ellos mismos y pasando los controles de calidad más exigentes. Además, han incorporado elementos de construcción biopasiva en la ampliación de la casa laboratorio de San Cristóbal de Segovia, con financiación de Triodos Bank.

+ Razones para trabajar con banca ética como particular u organización

Hasta llegar a sus 350 puntos de venta, los más de 70 productos de su catálogo nacen como ideas inspiradoras y se crean en lotes pequeños en colaboración con sus productores especializados. Su tienda online facilita no solo la compra desde cualquier punto, sino que ofrece información detallada de los ingredientes, así como consejos para sacar el máximo partido a sus aceites esenciales, cremas, lociones hidratantes o pasta de dientes.

La base de sus formulaciones son las plantas, con sus principios activos, que incluyen propiedades antioxidantes, calmantes o nutritivas. “Albergan toda la sabiduría de la naturaleza, y nuestra misión es intentar que esa sabiduría llegue a la piel de nuestros clientes”, afirma Ana. Crean fórmulas sencillas, pero lo importante para la marca es que contengan un gran porcentaje de sustancias activas para alimentar la piel.

Y además de ecológica, solidaria

Vivir en un entorno sostenible implica también para Amapola ser solidarios con quienes más lo necesitan. Por eso, están involucrados en un programa de microcréditos de la ONG Amigos de Tara, que trabaja con familias en Calcuta a través del acceso a la educación, alimentación y sanidad para más de 500 menores, para que puedan trazar su futuro en un entorno familiar con recursos suficientes. Para Amapola, destinar el 0,7% de sus ventas a esta organización desde sus inicios es un firme compromiso que creen que todas las empresas deben tener, como forma de retornar recursos a la sociedad y crear un ciclo positivo que sirva para proteger a los más desfavorecidos.

AMAPOLA
DE PAJAR A LABORATORIO

Biocosmetics es una marca de referencia en el sector de la cosmética ecológica, que nació en 2004 por iniciativa de Ana Isabel de Andrés, una farmacéutica que volcó en este proyecto todo su conocimiento en plantas medicinales.

El laboratorio está ubicado en el antiguo pajar de su abuelo en el municipio de San Cristóbal de Segovia, Segovia, y desde allí se crean fórmulas con gran cantidad de principios activos que distribuyen a más de 350 puntos de venta en toda España y online a través su tienda virtual.

Con la financiación de Triodos Bank la firma ha podido ampliar su laboratorio y adquirir nuevos equipamientos.

+ Más sobre Amapola Biocosmetics

+ Solicitar financiación con banca ética

BANCA ÉTICA
UN BANCO POR EL MEDIO AMBIENTE

El sector medioambiental abarca el 50,1% del total de la cartera de crédito de Triodos Bank en Europa. La actividad financiada en este sector contribuye a combatir el cambio climático a través de iniciativas de energías renovables, tecnología medioambiental, eficiencia energética, construcción sostenible y empresas del sector de la agricultura ecológica, así como iniciativas de conservación de la naturaleza.

+ Qué sectores financia Triodos Bank

texto CARMEN SOLÍS fotos AMAPOLA BIOCOSMETICS